Friquis Mortis Chihuahua

Ha tenido alguno de ustedes la desgracia de conocer un lindo perrito que llega de visita una noche cualquiera solo para verlo morir debajo de las llantas de un carro frente a la casa un par de horas después? Si, mis queridos. Este pechito acaba de agregar uno mas a a lista de sus traumas. Lo peor es que el miserable ni siquiera se cagó en el tapete como para haberle deseado tan cruel infortunio. Y es que la madre, yo si soy de malas para ver perros recién atropellados. Quién iba pensar que mientras su dueña, mis amigos y yo veíamos una película desde la comodidad de mi sala, el frenazo aquel que pensamos escuchar no era parte del sistema turron surround.

Por eso a ti, desafortunado chihuahua cuya dueña probablemente jamás volverá a poner un pie en mi casa (y menos a "echarme los perros," sin intención de sonar cruel), te dedico este poema:

ODA AL PERRITO ESPICHADO

Oh chihuahua de hermoso pelaje
por qué terminaste convertido en bagaje?
Quien te mandó a volarte del patio
acaso no pudiste controlar tus kilovatios?
A duras penas viviste un verano
y de verdad no pienso rimar esto con ano
Si hasta parecias estrella de cine
Pero ahi tiene chandoso pa' que afine!

Tus manchas de sangre quedaron esparcidas
y al guevón de mi compadre le tocó la recogida
Eras tan tierno, tan puro, tan inocente
pero por marica te ganaste este accidente
Si en mi patio habia pasto, flores, y tierra
y todo por andar detrás del culo de una perra.
Ahora a San Pedro en el cielo te toca convencer
y al llegar a su puerta decirle "Yo quiero Taco Bell."

Ay perrito, ingénuo canchosito
ahora tu dueña jamás me tirará un huesito
y uno aqui jodido con esta escasez
no me digas que a ti te sobraban mucho pues
Pero en fin, ya que le vamos a hacer
tu descansas en paz y a mi me toca moler
Y es así que doy término a esta oda
porque ya por ahi me gritaron "ole trabaje no joda."