Te extrañaremos (menos los gusanos)

R.I.P. Froggy Woggy. Julio 2009 - Abril 2010

Aún recuerdo el bonito dia en que llegaste a nuestras vidas. Eras tan lleno de vida, tan jovial, y tan... verde. Hoy al despertar te encontré tirado boca arriba al borde de la enorme narco-piscina construida a base de cáscara de coco que instalamos en tu hogar, y pude ver que literalmente habias "estirado la pata." Hace mucho no me embargaba tal sensación de tristeza.

Eres la tercera rana que veo morir bajo mi techo. La primera se llamaba igual que tú, pero duró solo un par de semanas en este plano terrenal y no tuve tiempo de encariñarme tanto de ella. Sospecho que su muerte se produjo debido al excesivo calor causado por una hijep*** negra que le dió por venir a cocinar todo el dia a mi casa, y en el acto te terminó cocinando a ti. Eso, o no pudiste con la caustrofobia de vivir encerrada en una cajita de cristal del tamaño de una bateria de carro.

Después de eso vi morir a tu esposa. O a tu esposo. O a tu amante maricón. La verdad no tengo ni idea quien era el macho, la hembra, o el Ricky Martin en este paseo, pero ante las incesantes peticiones de Sophie, un dia acepté regalarte algo de compañia anfibia, y pensé que eso te iba a hacer feliz. Pero no fué así. De inmediato tu esposa/esposo/potencial machucante se instaló al otro extremo de la casa, y no salió de ahi en una semana. Es mas, dudo que haya bajado a comer en toda la semana por mas apetitosos y crujientes que aparentaban estar los gusanos. Finalmente un dia desperté y estaban allí los dos junticos y arrunchados sobre de la pared de vidrio. "Qué escena mas tierna," pensé. El amor finalmente lo conquista todo, mira nomás este par de ranas ahí sacándose los barritos como si fueran un par de novios domingueros en pleno plan salitre. Al otro dia tu compañia yacía en la misma posición que amaneciste tú esta mañana, mientras al fondo Charles Aznavour cantaba "♫ morir de amor, como si fuese mi enfermedad... ♫"

Y hoy te llegó el dia, el temido dia que siempre supe habría de llegar, pero esperaba que no lo hiciera por cuatro años más. Se supone que el promedio de vida de una rana son cinco años, pero tu solo lo hiciste por diez meses. Entonces dime, qué pasó? No te gustó la comida? Estaba muy fuerte el aire acondicionado? Te molestaba que pusiera la música tan duro en la sala? Te suicidaste porque nunca te hice llegar tu suscripción a PlayFrog? Son preguntas que hoy me atormentan.

Pensé en disecarte y exhibirte sobre alguna mesita como un eterno recuerdo de tu muda presencia, pero despues se me ocurrió que eso podria tener un efecto severamente adverso en relación a las visitas que llegan a esta casa. Finalmente me puse unos guantes de latex y decidí sacarte colgado de una pata para poder apreciarte mejor y preguntarte por qué, oh, por qué me has abandonado? Aún te encontrabas blandito, y de no ser porque tu coto ya no se inflaba podría haber pensado que me estabas mamando gallo con todo esto. Será que lo entierro? "Aqui yace Froggy Woggy, amigo, hermano, hijo, mascota" Todavía no lo decido. Solo sé que por ahora estás muy tieso y muy majo sobre una caneca en mi patio tomando el sol, mirando a las ardillas retozar sobre el cesped, y sintiendo la tenue brisa primaveral acariciar tu cauchuda piel como nunca antes pudiste hacerlo. Me decidiré qué hacer antes de que lleguen por tí las hormigas.

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